El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) denuncia la última ocurrencia estatal contra el ahorro: los topes a la rentabilidad de los depósitos. Una vez más, los ahorradores se ven perjudicados por la acción de gobierno. Es evidente que los políticos no han entendido nada de esta crisis. Se intenta solucionar un problema causado por el exceso de deuda y la falta de ahorro, precisamente con más deuda y con menos ahorro. Se intenta solucionar un problema causado por la regulación con más regulación. Y se intenta solucionar los problemas de solvencia de los bancos aumentando los problemas de solvencia de los ciudadanos, que están financiando los rescates de esos mismos bancos.
VALENCIA. Conferencia de Juan Ramón Rallo
El P-LIB y la Asociación Atlas para la Defensa de las Libertades organizan la conferencia que bajo el título «Una alternativa liberal para salir de la crisis» pronunciará el profesor Juan Ramón Rallo. Lugar: Workether C/ Serpis nº 3 Bajo, Valencia. Fecha: 18 de febrero de 2013 a las 19:00. …
El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) expresa su estupor ante el hecho, conocido ayer, de que el ex tesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, ocultaba en Suiza más de veinte millones de euros presumiblemente relacionados con el caso Gürtel, de los cuales legalizó una parte mediante la llamada «amnistía fiscal» aprobada por el ministro Montoro, según se ha sabido hoy. Como siempre sucede en estos casos, el PP está guardando un silencio cómplice y bochornoso, mientras el PSOE, que se comporta igual ante los casos propios, señala ahora la paja en el ojo ajeno. El P-LIB reitera su convicción de que PP y PSOE son las dos caras de una misma moneda.
El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) manifiesta su profunda consternación por la muerte en Afganistán del sargento David Fernández Ureña, y expresa su más sentido pésame a sus familiares, amigos y compañeros. Tristemente, esta muerte vuelve a poner de manifiesto la inutilidad e ilegitimidad de una misión que ya le ha costado a España la vida de más de cien militares. Este coste en vidas humanas es insoportable y pone de manifiesto el despropósito de la misión. Aunque, por supuesto, resulta secundario frente al coste en vidas humanas, también el económico es inasumible en este momento de grave crisis.