El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) insta al gobierno español a ejercer su presidencia de turno de la Unión Europea, que hoy se inicia, pensando ante todo en la libertad y la soberanía personal de los ciudadanos europeos. En particular, consideramos necesario que durante el presente semestre se avance en las diez materias siguientes:
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El refuerzo de las competencias del Parlamento y de su auténtico control de la acción de gobierno de la Comisión, así como de la capacidad de los ciudadanos europeos de hacer valer sus derechos individuales frente a las imposiciones de Bruselas.
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La drástica reducción de la burocracia europea incontrolada, que supone hoy una seria amenaza al proyecto de construcción europea y genera un fuerte rechazo popular y un enorme descrédito de las instituciones de la Unión.
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El refuerzo del secreto de las comunicaciones y del derecho a la privacidad y el libre intercambio de información en Internet.
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El refuerzo de la confidencialidad bancaria y financiera para todos los ciudadanos y empresas de Europa.
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La liberalización económica, la simplificación de las regulaciones y la eliminación de trabas al ejercicio del derecho fundamental e inalienable a emprender y comerciar; la liberalización y flexibilización del mercado de trabajo; el desarme arancelario y otras medidas de inserción de Europa en la economía global.
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El derecho de las personas a una muerte digna, es decir, basada estrictamente en su voluntad individual inalienable, ya sea consciente o en virtud de las últimas voluntades registradas.
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El fin de la supuesta guerra contra el narcotráfico y su sustitución por la única política realmente efectiva contra las mafias del narco: la legalización coordinada de todas las sustancias en toda Europa, empezando por las drogas blandas, lo que además liberará a los ciudadanos de la tutela paternalista del Estado.
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La extensión de los plenos derechos de las personas homosexuales, bisexuales y transexuales a aquellos países de la Unión donde aún no están suficientemente garantizados.
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La promulgación de topes jurídicos a la imposición fiscal y al endeudamiento de la Unión y de sus Estados miembros, y la transición hacia un sistema fiscal basado en el principio de proporcionalidad.
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La sustitución de la flotación del euro por un anclaje efectivo de la moneda europea al patrón oro.
Naturalmente, el P-LIB no cree que la presidencia española vaya a conducir a la Unión Europea en ninguna de las direccíones señaladas, y denuncia la influencia de ex dirigentes socialdemócratas como Jacques Delors y Felipe González sobre los planes de Zapatero para el semestre. Son las políticas de esta clase de dirigentes las que han sumido a la Unión en un pozo de descrédito difícilmente remontable.
P-LIB
