Sí con matices a la reforma de las cajas

El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) considera que la reforma de la LORCA que entra hoy en vigor es un paso en la buena dirección, al avanzar en su despolitización. El anuncio realizado ayer por el presidente de gobierno elimina la posibilidad de que aquellos políticos que ostenten cargos electos puedan sentarse en los consejos de administración de las cajas. Esto en realidad no impide que siga habiendo en ellos personas directamente vinculadas a los partidos políticos y más leales a los mismos que a los intereses de las cajas.

El P-LIB celebra la decisión de ampliar las fuentes de financiación de las cajas y de flexibilizar su estructura, de tal manera que puedan privatizarse transformándose en bancos o ser controladas por éstos dedicándose una fundación a la gestión de su obra social. Sin embargo, un 50 % de participación del mercado resulta muy insuficiente y sólo podemos apoyarlo como primer paso hacia la total privatización de estas entidades. El P-LIB habría preferido que las cajas se privatizaran simplemente mediante subasta pública.

El obsoleto sistema de cajas y montes de piedad, nacido del modelo de prebendas reales de siglos pasados y multiplicado merced a los diversos poderes locales, ha sido uno de los causantes de la desastrosa situación financiera española, ya que no respondían a criterios económicos sino políticos, haciendo un uso ilícito de las obras sociales como herramienta política, y un uso partidista de los préstamos.

El P-LIB aboga por una reforma profunda del sistema bancario, en el que no tienen cabida entidades como las cajas de ahorro y en el que debe eliminarse la reserva fraccionaria.

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