El fiasco olímpico madrileño: despilfarro y corrupción

Héctor Muñoz | P-LIBEl Partido Libertario (P-LIB) de Madrid encuentra escandalosas las nuevas informaciones sobre el coste que tuvo el fracasado intento de los Juegos Olímpicos en Madrid. Informaciones que incluyen datos relativos al sueldo del director de la candidatura olímpica —10.800 €/mes—, pagos a expertos del mundo olímpico que a su vez, previamente, habían sido contratados por varias candidaturas rivales, aportaciones a los planes de pensiones de los directivos de la fundación Madrid 2012, y la aparición de tarjetas con gastos sin controlar. El coste de mandar la delegación olímpica española a Singapur superó ampliamente el medio millón de euros

Han apareciendo incluso gastos cargados a las tarjetas tras saberse que la candidatura de Madrid había fracasado, con implicados tanto del PP, como del PSOE e IU, en otro escándalo más de gasto político desenfrenado.

El Partido Libertario aplaude la iniciativa privada, como no podía ser menos, pero entiende que en estos casos dicha iniciativa privada no se da de forma natural sino de la mano del poder político y de su desmedido poder discrecional, es decir, que es producto más del poder del Estado que de la libertad económica, corriéndose el riesgo además de que sea una válvula de escape para sobornos con el objetivo de conseguir nuevas licitaciones de obra pública. Prebendas todas ellas que, como siempre y no lo dudamos, serán traspasadas al contribuyente en forma de un aumento del presupuesto. La solución que proponemos los libertarios es desvincular a los políticos de las concesiones de obras, reduciendo su poder de decisión para evitar que las aportaciones voluntarias se conviertan en el precio de entrada a la gran fiesta del reparto del dinero público, fiesta a la cual los ciudadanos sólo están invitados para ejercer de lo que se conoce habitualmente como “pagafantas”. Así mismo, el P-LIB desconfía de la utilidad que pueda tener organizar unos Juegos Olímpicos. Debemos apostar por un comportamiento austero por parte de las administraciones, y nada más lejos de este objetivo que esta pesadilla Olímpica de los políticos.

Héctor Muñoz, miembro de la Comisión Ejecutiva Madrileña, es contundente en sus declaraciones sobre el escándalo de Madrid 2012 “¿Dinero privado? Dinero que proviene incluso de algunas empresas de la trama Gürtel. Madrid ni necesitaba unos Juegos Olímpicos en el 2012 ni los necesita ahora. Lo que Madrid necesita es un Ayuntamiento que realmente se preocupe por los madrileños, por la austeridad política, y que se deje de proyectos faraónicos que al final han acabado resultando un mero trasvase de rentas a los bolsillos del burócrata de turno. Un trasvase de un dinero que brotaba sin control y que fue usado de forma inadecuada por empleados públicos. En vez de apostar por una candidatura más austera y realista, al parecer se optó más por un proyecto pensado para el reparto de favores”. A lo que añade “Por otro lado no debemos olvidar que los últimos Juegos Olímpicos han sido un grandioso fiasco para los países organizadores. Lejos quedan los tiempos en que montar unos Juegos creaba prestigio y prosperidad. Hoy en día, por ejemplo, unos Juegos Olímpicos significan un elevado gasto en medidas antiterroristas y en unas infraestructuras deportivas sobredimensionadas, que terminan cayéndose a pedazos por un mantenimiento deficitario”. Y concluye Muñoz “Los libertarios claro que estamos a favor de la existencia de las infraestructuras deportivas, pero bien conservadas y ajustadas a la demanda, y esto sólo es posible permitiendo que sea una empresa privada quien ostente las labores de gestión y mantenimiento, ya que los alcaldes electoralmente viven de inaugurar y no de mantener”.

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