No al bloqueo de webs extranjeras

El P-LIB considera confusas y antijurídicas las atribuciones que el gobierno español pretende otorgar a la Comisión de la Propiedad Intelectual, dependiente del Ministerio de Cultura, siempre según la información recogida por los medios de comunicación. Tras el Consejo de Ministros del viernes 8, una vez haya quedado definitivamente expuesta la formulación final, el P-LIB expresará su punto de vista. De igual manera, la semana próxima el P-LIB elaborará un informe de situación que hará llegar al Grupo Liberal del Parlamento Europeo y de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.

A fecha de hoy, sin embargo, es importante señalar la alarma que nos ha producido una de las informaciones publicadas, según la cual esta comisión podrá instar la adopción de medidas que obliguen a los carriers telefónicos primarios a cerrar el acceso a sitios web de otros países (es decir, registrados en otras jurisdicciones y alojados fuera de nuestras fronteras) si contienen enlaces que a juicio de ese órgano resulten inadecuados. En otras palabras, el gobierno español pretendería censurar sitios web extranjeros para contentar a la SGAE, Promusicae y otras entidades gestoras que pretenden a estas alturas basar su negocio en la generación de escasez. Esta brutal conculcación de los derechos individuales, que además proyecta ilegítimamente la jurisdicción del Estado español al planeta entero, no puede quedar así, y el P-LIB participará en cuantas movilizaciones convoquen las organizaciones pro-libertad en Internet.

Al plantear estas medidas, el gobierno español se pondría a la altura de China o Cuba y haría de los operadores telefónicos españoles cómplices de una censura intolerable. El P-LIB llama a la ciudadanía a resistirse frente a estas imposiciones en el caso de que lleguen a entrar en vigor, utilizando para ello cuantos sistemas de proxy y de encriptación estén a su alcance para asegurar una navegación online absolutamente libre.

El P-LIB insta al Partido Popular, como principal partido de la Oposición, a dejarse de vaguedades y de posturas contradictorias entre sus dirigentes, y oponerse frontalmente a la censura gubernamental de Internet, sumándose a las movilizaciones ciudadanas y ejerciendo una firme oposición parlamentaria.

 

 

P-LIB

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