El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) lamenta profundamente y rechaza con rotundidad la prohibición a empresas y autónomos de pagos en efectivo superiores a dos mil quinientos euros, anunciada hoy por el Presidente del Gobierno. Es una medida liberticida que no va a generar grandes ingresos extraordinarios para el Estado, ya que los afectados dividirán sus transacciones en más operaciones individuales. Es además un síntoma del fracaso del modelo de Estado hiperfiscalizador e intervencionista, que no permite transacciones libres ni siquiera utilizando el propio dinero fiduciario que él emite en régimen de monopolio. Y es una medida propia de los gobiernos colectivistas inspirados en el consenso socialdemócrata que ha llevado a toda Europa a la actual crisis económica. Es una desgracia que el Partido Popular demuestre una vez más haber asumido por completo el pensamiento económico socialdemócrata y aplicarlo incluso hasta extremos que ni el anterior gobierno se había atrevido a alcanzar.
El P-LIB reivindica el derecho a la intimidad financiera y a la plena confidencialidad de las transacciones económicas, y deplora que se intente criminalizar a las empresas y a los trabajadores autónomos. A estos últimos se les produce además un especial agravio ya que los trabajadores por cuenta ajena sí podrán comprar en efectivo sin limitación y ellos, por ser autónomos, no podrán hacerlo. Además, se pone a las empresas en la incómoda situación de chivatos respecto a sus clientes. El P-LIB confía en la creatividad de los ciudadanos para evitar esta medida injusta y antieconómica, y defiende su derecho a pagar y cobrar haciendo uso de cualquier medio de pago. Es tal vez el momento de que la población y la comunidad empresarial recurran a intercambios directos desmonetizados y comiencen a emplear masivamente sistemas de transacción económica P2P como Bitcoin.
